Cada 18 de noviembre vibra la Tierra del Sol Amada, Maracaibo, y todo el estado Zulia con la celebración de su excelsa patrona: La Virgen de la Chiquinquirá. Y es que desde aquel 18 de noviembre de 1709, cuando la Virgen se manifestó en la “tablita” que la humilde lavandera recogió de las orillas de la laguna de Coquivacoa, se ha multiplicado la devoción por la denominada Virgen Morena.
La fe es la que mueve a miles de zulianos quienes cada año le rinden tributo a la virgencita con múltiples manifestaciones de fe y la entonación del canto preferido de la región, las famosas gaitas. Cada una de ellas revela el infinito amor por la advocación de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá.
Las historias y las leyendas en torno a la “tablita” son muchísimas. A continuación te presentamos algunas de las curiosidades sobre la Virgen de la Chinita:
- El nombre de la humilde lavandera era María Cárdenas, habitante de un barrio humilde de Nueva Zamora de Maracaibo denominado “El Saladillo” quien tomó la tablita y la llevó a casa y la colocó como tapa. Se dice que la tablita saltó en tres oportunidades para llamar la atención de la humilde mujer y fue al tercer toque cuando le prestó atención y al ver la imagen de la santa madre exclamó: ¡Milagro, milagro!
- Enairo Villasmil, joyero de la Virgen desde 1969, ha manifestado que debía manipular la tablita en varias oportunidades para limpiarla y darle mantenimiento, después de la Bajada, el día de La China y antes de subirla de nuevo a su altar. Cada vez que esto ocurría, señaló, sucedía algo inexplicable. “Cuando uno tiene ese retablo en la mano la voz se le silencia. No habla, sólo se piensa, y sobre ese pensar salen lágrimas”, expresó.
- De acuerdo a la creencia popular cuando se ve la imagen más clara es porque la Chinita está presente en la Basílica y cuando no se observa muy bien es porque está haciendo un milagro.
- La vista de la Virgen de Chiquinquirá está ligeramente hacia la izquierda lo que hace pensar que sigue su camino a la entonces Provincia de Venezuela, tal como en efecto ocurrió cuando la mujer la tomó de las aguas del Coquivocoa, hoy Lago de Maracaibo.
- El joyero sostiene que posterior a 300 años de la mágica aparición “No se le ha borrado ningún detalle a su figura y en algunas ocasiones brilla más que en otras”, manifestó.
- El retablo de la virgen permaneció totalmente cubierto por un manto y solo era retirado cada 18 de cada mes. En la actualidad es soportado por una base de aluminio que lo sostiene, para que no choque con el vidrio durante las bajadas, procesiones o subidas al camerín.
- La virgen a lo largo de los años ha visitado lugares del país como una vez que visitó la ciudad capital así como diversas localidades del estado Zulia por medios fluviales y aéreos. Los 18 de noviembre se amanece acompañando a la virgen y todo el territorio zuliano vibra en cada casa para honrar a la excelsa patrona.
Artículo por elcambur.com.ve
